SI EMPIEZAS A COMER PATAS DE POLLO ESTAS 5 COSAS TE PUEDES SUCEDER SIN ESPERARLO

El caldo del pollo o de sus huesos es rico en un aminoácido natural llamado cisteína. Dicha sustancia ayuda a adelgazar la flema de los pulmones que se genera durante las enfermedades respiratorias, con lo cual será más fácil su expulsión.

Para un mayor efecto, puedes recurrir al caldo de huesos, mismo que incluye pellejos, pico, mollejas y, por supuesto las patas.

Otro de los beneficios es el aporte de minerales como calcio, magnesio, silicio y azufre. Como resultado, tus huesos se fortalecerán y además puedes prevenir enfermedades óseas como la artritis y la osteoporosis.

Además, incluir patitas de pollo en tu dieta es de gran beneficio para tu intestino, ya que es rica es un caloide hidrofílico, lo cual ayuda a absorber líquidos corrosivos del sistema digestivo, mejorando la digestión. Entre las vitaminas, las patitas son ricas en B2.

¿Cómo limpiar las patitas de pollo?

Recordemos que las patas de pollo son el principal punto de contacto de estas aves con el piso. Por ello, es importante que las limpies perfectamente antes de su consumo.

Primero lava bien las patas con agua y jabón. Luego sumérgelas durante 30 segundos en agua hirviendo y sácalas. Retira la primera capa de piel. Es de vital importancia recortar las uñas.

Conoce los beneficios de comer patitas de pollo

Tradicionales en la gastronomía mexicana, las patitas de pollo poseen grandes beneficios para nuestra salud.

Son deliciosas y por las noches las encontramos en numerosas calles de nuestro país. Amigas inseparables de los esquites, los elotes y las mollejas, las patitas de pollo son algo más que un simple antojo callejero. Detrás de ese sabor tan popular, se esconden grandes beneficios para la salud. Entre los principales países que las consumen se encuentran México, China, Trinidad, Jamaica, España, Perú y Filipinas.

De acuerdo con una investigación hecha por la Universidade Nove de Julho en Brasil, las patitas de pollo son una fuente de colágeno. Esta proteína es la encargada de regenerar nuestros tejidos, cabello, uñas, etcétera; es decir, todo lo referente al sistema tegumentario.

Patas de Pollo al Horno con Limón y Hierbas

Ingredientes:

8 patas de pollo
2 limones (jugo y ralladura)
4 dientes de ajo, picados finamente
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharada de romero fresco (o 1 cucharadita de romero seco)
1 cucharada de tomillo fresco (o 1 cucharadita de tomillo seco)
Sal y pimienta al gusto
Rodajas de limón para decorar

Instrucciones:

Marinado:

En un bol grande, mezcla el jugo y la ralladura de los limones, el ajo picado, el aceite de oliva, el romero y el tomillo. Agrega sal y pimienta al gusto.

Preparación del pollo:

Lava las patas de pollo y sécalas con papel de cocina.
Coloca las patas de pollo en el bol con la marinada y asegúrate de que estén bien cubiertas con la mezcla. Cubre el bol con papel film y deja marinar en el refrigerador durante al menos 1 hora (idealmente, 2 horas o más para que los sabores se mezclen bien).

Cocción:

Precalienta el horno a 200°C (390°F).
Coloca las patas de pollo en una bandeja para hornear, asegurándote de que estén distribuidas uniformemente. Puedes verter un poco de la marinada restante sobre las patas de pollo antes de meterlas al horno.
Hornea las patas de pollo durante aproximadamente 30-40 minutos o hasta que estén doradas y completamente cocidas. Puedes voltearlas a la mitad del tiempo de cocción para que se cocinen parejo por ambos lados.

Servir:

Una vez listas, retira las patas de pollo del horno y déjalas reposar unos minutos.
Sirve las patas de pollo con rodajas de limón y acompaña con arroz, ensalada o tus guarniciones favoritas.
¡Listo! Disfruta de estas deliciosas patas de pollo al horno con un toque cítrico y aromático.